El Concurso Nacional de Arte Joven de la Universidad de Valparaíso es una actividad cultural que desde sus inicios ha sido un espacio para la expresión de quienes a través de su labor creativa buscan dar cuenta de la época que les ha tocado vivir. Cada versión, sin duda, tiene un poco de ese momento que grafica la experiencia del artista en su entorno. Hoy, precisamente, en medio de la convulsión social que afecta al país, la cuadragésimo primera versión de este tradicional certamen quedará en la memoria como aquella que tuvo la oportunidad de, al menos esbozar un momento que, a no dudar, marcará la historia de nuestro país.

Por ello, a pesar de coincidir la fecha de entrega de las obras con los sucesos que vive el país, decidimos no postergar ni suspender el concurso, pues el arte –tantas veces postergado, hay que repetirlo siempre- requería de un espacio de expresión que aunque no necesariamente diera cuenta del presente mismo, al menos nos mostrara desde la particular mirada del joven creador aquello que mañana pueda explicarlo.

Allí radica entonces el valor de haber realizado este concurso a pesar los tiempos azarosos que vivimos, y porque a pesar de todo, sigue siendo uno de los pocos espacios para los artistas emergentes, lo que es una expresión más de la mirada errónea y sesgada con que se ha ido configurando nuestra sociedad. Es justo, por tanto reclamar en estas horas de tantas demandas, que un Chile diferente requiere también de mayores espacios para la creatividad artística. En eso nos hemos empeñado y la Universidad no claudicará en ese afán.

Al cerrar estas breves palabras de presentación del catálogo oficial de las obras seleccionadas del XLI Concurso Nacional de Arte Joven quiero agradecer al jurado, al director del concurso, a los funcionarios y funcionarias de la Dirección de Extensión y Comunicaciones que han apoyado esta actividad, y de modo especial al rector Aldo Valle, quien ha tenido una especial preocupación por preservar y mantener vigente este certamen. Al concluir próximamente su rectorado, merece este público reconocimiento.

David Carrillo Rojas
Director de Extensión y Comunicaciones
Universidad de Valparaíso